Un equipo de investigadores de la Universidad de Amsterdam ha llevado a cabo un estudio acerca del comportamiento de las conocidas como estrellas de tipo O, aquellas que tienen una alta temperatura, masa y brillo. Así, y tal y como recoge el Daily Mail.
Estas estrellas tienen una vida corta y violenta, y desempeñan un papel clave en la evolución de las galaxias.
Y uno de los fenómenos más curiosos estudiados por los científicos ha sido el de las estrellas vampiro, aquellas que, aún siendo más pequeñas, 'chupan' la materia que hay en la superficie de su estrella más cercana. Estas estrellas tienen un tamaño 15 veces mayor que el de nuestro Sol y pueden ser hasta un millón de veces más brillantes. Además, alcanzan una temperatura de superficie de más de 30.000 grados.
Los investigadores descubrieron además que la proporción de parejas de este tipo de estrellas, que interactúan a modo de vampiros, es mucho mayor de lo que se pensaba. Además, su enorme actividad y su violenta relación impulsan la evolución de las galaxias. Así, uno de los científicos asegura que "si dos estrellas orbitan muy cerca unas de otras pueden llegar a fusionarse; pero incluso aunque no lo hagan, una de ellas puede a menudo concentrar en sí la materia de la otra".
Además, esta interacción ayuda al rejuvenecimiento de las estrellas pequeñas, ya que absorben el hidrógeno fresco de su compañera. Además, su masa se incrementará de manera sustancial y sobrevivirá mucho más tiempo. Por su parte, la que es despojada de su masa queda con su núcleo al descubierto, aparentando ser más joven de lo que es.
Fuente: teinteresa.es