La gestión de residuos no peligrosos es indispensable para toda empresa. Cuando un negocio quiere desechar una sustancia u objeto que ya no sirve se convierte en un residuo. Existen diversos tipos de residuos. En función del criterio podemos encontrar:
- Según su peligrosidad: inertes, peligros y no peligrosos.
- Según su origen: domésticos, comerciales, industriales…
- Según su composición: orgánico, inorgánico y mezclado.
Los residuos no peligrosos son aquellos que no tienen unas determinadas características consideradas como peligrosas. Por lo que no presentan daños para el medio ambiente o la salud.
Confiar en profesionales como Irmasol Andalucía para la gestión de residuos no peligrosos es un gran acierto. Gracias a ellos podrás darles el tratamiento necesario a los residuos sin tener que preocuparte por ellos.
Las etapas correspondientes son:
- Recogida de residuos. Desde tu empresa deberás depositar los residuos en los contenedores adecuados. Dependiendo del residuo encontramos urbanos o industrial.
- Transporte de residuos. Se vaciará el contenido en camiones que se encargarán de llevarlos hasta el lugar de destino. Los profesionales cuentan con los medios adecuados para poder realizar este traslado sin ningún problema.
- Tratamiento de residuos. Dependiendo del residuo y su composición se hará un tratamiento u otro. Algunos de estos residuos serán reutilizados, mientras que otros pasarán a eliminarse.
Todas las empresas generan gran cantidad de residuos a lo largo del año. La buena gestión de estos es indispensable si queremos que aquello que producimos no acabe siendo un problema para el medio ambiente. Residuos como el papel, madera, cartón o envases pueden tener una segunda vida siempre que se traten como es debido.
Colocar contenedores de residuos permitirá que puedas colocarlos sin problema en ellos y posteriormente poder contar con especialistas en su gestión para que sean tratados como es debido. Asegúrate de que todo llegue al destino necesario para su buen tratamiento.
