Mercedes-Benz utiliza algunos motores fabricados por Renault en sus coches. Detrás de esto se encuentra una serie de motivaciones comerciales entre Daimler (empresa matriz de Mercedes y Smart) y la Alianza Renault-Nissan.
El objetivo final es lograr una reducción de costes de producción y una cartera más amplia de productos.
Por esta clase de acuerdos es que debes llevar tu coche a un taller oficial Mercedes si es de esa marca. En estos sitios es dónde conocen los detalles de los componentes de cada modelo y cómo tratarlos.
La relación entre Renault y Mercedes-Benz
La historia comienza en el año 2009, cuando Daimler y la Alianza Renault-Nissan (a la que también se sumó Mitsubishi un tiempo después), llegaron a un acuerdo en el que ambas partes se verían beneficiadas.
La idea comenzó con la fabricación de los famosos Smart ForTwo y Smart ForFour por parte de Renault, ya que comparte el 70% de los componentes del Renault Twingo.
Sin embargo, el acuerdo evolucionó hasta la adopción de los motores por parte de Mercedes, a cambio de información sobre la producción y pruebas de calidad para mejorar sus vehículos.
Esta clase de acuerdos no deberían sorprendernos si pensamos que vivimos en un mundo globalizado.
Estas decisiones son comunes desde hace muchísimas décadas, las cuales se toman en la búsqueda de la eficiencia productiva y la optimización de costes. Las sinergias empresariales dan paso a mejores productos para los consumidores.
Los motores Renault utilizados en coches Mercedes de calle
“Mercedes con motor Renault”. A pesar de ser una frase bastante escuchada entre los aficionados de los coches, este caso se ha dado en contadas ocasiones.
Además, no podemos decir que se trata de motores hechos al 100% por Renault, ya que Mercedes ha intervenido en parte de su desarrollo.
Los motores de gasolina
Quizás el más famoso sea el bloque de gasolina de 1.33 litros y cuatro cilindros, fabricado por la Alianza Renault-Nissan. Ofrece potencias que van desde los 130 CV hasta los 163 CV, presente en la mayoría de los modelos de la gama compacta de Mercedes (Clase A, Clase B, CLA, GLA y GLB), en algunos de Renault, y unos pocos de Dacia y Nissan.
El caso de los motores para los Smart
El segundo motor de Renault utilizado en un coche Mercedes es el propulsor tricilíndrico turbo 0.9 TCe de 90 CV. Se utilizó en la fabricación de los ForTwo y ForFour, hasta que Daimler decidió abandonar los motores de combustión térmica para dar el salto definitivo a la movilidad eléctrica en los coches de Smart.
Desde 2019, el motor se reemplazó por un sistema de propulsión eléctrico con un motor de 60 kW (82 CV) y 160 Nm de par. Es bastante común entre los modelos de Smart y en el Renault Twingo Z.E.
El bloque K9 de diésel
Por último, tenemos el motor diésel de Renault que Mercedes usó en sus coches durante varios años. Se trata del bloque K9 de cuatro cilindros y 1.461 cc, conocido en Mercedes como el OM608. Fue fabricado con la idea de tener un bajo consumo y una alta fiabilidad. Estuvo disponible con potencias entre 75 CV y 116 CV.
El bloque estuvo presente en la gama compacta y comercial durante casi 10 años. Fue reemplazado por el bloque OM654q en los modelos de Clase A y Clase B a partir de octubre de 2020.El nuevo motor es OM654q de cuatro cilindros que da desde 116 CV hasta 190 CV de potencia y 280 Nm de par, y es fabricado en su integridad por Daimler. Está disponible en varios modelos de Clase A, Clase B y Clase CLA, además de que se espera que llegue a los GLA y el GLB. Viene únicamente con cambio automático DCT-8G de doble embrague y ocho relaciones.
