Bélgica (con más de 2.100 tiendas de chocolate) o Suiza, de don de es el mejor chocolate (e incluso hay un chocolate que ni engorda ni se derrite), son lugares icónicos para los chocolateros. El equivalente al Camino de Santiago para los amantes del cacao.
Sin embargo, el país donde más chocolate se consume en todo el mundo es Estados Unidos (hasta hace poco, también era un país donde se bebían más refrescos que agua, pero ahora las tornas han cambiado). Con todo, existe un reducto de consumidores extraordinarios de chocolate: los indígenas kuna de Panamá, que beben un promedio de 40 tazas de chocolate por semana. Estos indígenas, curiosamente, apenas sufren hipertensión, y la incidencia de infarto, de enfermedades coronarias, de cáncer y de diabetes es inferior al 10%.
Calma la tos
La teobromina, un componente presente en el cacao y por lo tanto en los productos con chocolate, podría contribuir a calmar la tos persistente, según un estudio llevado a cabo en el Imperial College de Londres, pues este componente inhibe la actividad del nervio vago que nos hace toser.
El chocolate, incluso, podría ser más efectivo que un jarabe típico para la tos: se comprobó que un tratamiento a base de teobromina era más eficaz que la codeína.
Fuente: xatakaciencia.com
