Las cadenas de televisión darían lo que fuera por tenerla en su plató, aunque lo único que ha trascendido hasta ahora es que su nombre de pila es Kika y que debe ser una mujer muy valiente.
Con el piloto, que era su marido, desmayado o tal vez muerto y a más de 3.000 pies de altura, la mujer tuvo la sangre fría de ponerse en contacto con las personas adecuadas para recibir instrucciones de aterrizaje. Algo que no había hecho nunca porque no tiene conocimientos de vuelo. Aunque sufre diversos traumatismos, se encuentra estable.
“Ha sido todo de película”. Es el resumen de las declaraciones a la cadena SER del controlador aéreo Fran Gonzálvez para explicar su intervención en la gestión del accidente del ultraligero que este fin de semana le costaba la vida a su piloto, pero cuya mujer salvaba la vida haciendo un aterrizaje de emergencia con las indicaciones de Gonzálvez y de agentes de la Guardia Civil que volaron con un helicóptero en torno al ultraligero mientras este intentaba descender sobre una de las pistas del aeropuerto de Sevilla. Uno de los agentes fue quien sacó a la mujer del aparato poco antes de que este se incendiara.
“Las primeras llamadas que recibimos fueron muy desconcertantes, cuando ella llamó era una persona con un ataque de histeria. Hasta que descubrimos qué ocurría, que era una persona que estaba en un avión sin saber volarlo, se vivió en la sala de control una experiencia increíble”, explicó también Gonzálvez.
‘S DE SEVILLA’
Esta es parte de la conversación con la torre de control del aeropuerto de Sevilla, difundida inicialmente por Diario de Sevilla y recogida también por la cadena SER:
–Por la derecha, pon el rumbo… empieza a virar hasta que el avión… hasta que veas una S en la brújula… y con una rayita justo encima de la S.
–¿S de Sevilla?
–S de Sevilla, correcto; S de Sevilla.
–Espérate, que esto es muy difícil!
–El avión vuela sin problemas. Tranquila que el avión no se va a caer. ¿Qué altitud tienes?
-3.700″
-3.000 está bien por el momento. Puedes mantener 3.000 pies. No tienes que bajar más hasta que te llevemos a Antonio delante de ti.
Antonio es un amigo del matrimonio que se situó con su avión delante mientras el helicóptero de la Guardia Civil se colocaba detrás para guiarla hasta las inmediaciones del aeropuerto de Sevilla. Ya en las proximidades de las pistas, Kika perdió el control del avión y finalmente se estrelló contra un naranjo.
SITUACIÓN ESTABLE
La mujer permanece “estable y se encuentra en observación a la espera de comprobar su evolución”, en el hospital Virgen del Rocío, según fuentes del propio centro médico. Estas mismas fuentes han asegurado en la mañana de este lunes que la accidentada continúa “estable, consciente y no necesita cuidados intensivos”. Una vez trasladada al Virgen del Rocío este domingo, los médicos constataron que sufría un politraumatismo grave y “diversas fracturas”, además de quemaduras leves.
A expensas del dictamen del forense, se piensa que el piloto pudo fallecer, quizá incluso antes del siniestro, lo que desencadenó en la situación saldada con este accidente. A la espera de los resultados de la autopsia practicada al cadáver del piloto, el equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de La Rinconada trabaja sobre la base de que la aeronave cayó por “causas accidentales”, con lo que la citada autopsia determinará si el piloto murió durante el vuelo, después de desvanecerse, o como consecuencia del impacto de la aeronave, según han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.
UN TRAYECTO CORTO PERO ACCIDENTADO
La aeronave siniestrada es un ultraligero que despegó de Trebujena (Cádiz) al objeto de aterrizar en Coria del Río (Sevilla), tras un vuelo siguiendo la rivera del Guadalquivir. A bordo del ultraligero iban el piloto y su esposa.
Durante el vuelo, el piloto habría sufrido un desmayo, toda vez que su esposa carecería de conocimientos de aviación, por lo que a través de un teléfono móvil habría alertado de la situación a un amigo del piloto y éste, a su vez, habría alertado a los servicios de urgencia minutos antes de las 13,00 horas.
Movilizados efectivos de numerosos servicios de emergencia, un helicóptero de la Dirección General de Tráfico (DGT) y una avioneta del aeropuerto despegaron al objeto de localizar a la aeronave, siendo interceptada sobrevolando el municipio sevillano de Brenes. Desde el helicóptero y la avioneta, y también por radio mediante la torre de control del aeropuerto, la mujer del piloto fue recibiendo instrucciones al objeto de intentar realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Sevilla, cerrado a cuenta de esta situación extraordinaria.
No obstante, la aeronave acabó estrellándose en las proximidades de la pista este del aeropuerto de Sevilla. El operativo de rescate extrajo de la aeronave a ambas personas, si bien el piloto estaba ya muerto, quizá incluso antes del accidente, su esposa estaba herida y fue evacuada a un hospital.
Fuente: andalucesdiario.es
