Famosísisma actriz y cantante no se priva de los tacos altos y los costosos vestidos pese a su enorme panza de embarazo.
Jessica Simpson debe estar deseando que su embarazo termine. La cantante está esperando un hijo y su panza no puede más, según quedó a la vista en las fotos que salieron a la luz.
Pese al avanzado estado de gestación, Jessica no se priva de lucir siempre perfecta para las cámaras.
De compras por Beverly Hills, la cantante apareció con un vestido rojo y unos tacos altísimos, un look más cercano a una diosa que al de una futura mamá. Igualmente, ella se cuida: lleva una asistente para que cargue las bolsas del local donde fue de shopping.
La rubia tiene sus próximos pasos calculados ya que firmó un contrato por 4 millones de dólares para ser la nueva imagen de la compañía Weight Watchers. Es que, a fuerza de dieta y ejercicio, Simpson espera quedar como Jessica Alba.
Fuente minutouno.com.ar
