Según revela la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME), nuestro país ocupa la quinta posición en el ranking de intervenciones estéticas anuales, siendo únicamente superado por Estados Unidos, Brasil, México y Alemania. En 2021 se practicaron más de 447.000 intervenciones en España, es decir, 1225 intervenciones diarias. Además, se espera que en el futuro las cifras continúen creciendo. Las garantías en materia de seguridad, los resultados cada vez más naturales gracias a un desarrollo científico y tecnológico especialmente acentuado durante las últimas décadas o la percepción cada vez más naturalizada de los tratamientos estéticos son algunos de los principales factores que influyen en el crecimiento de intervenciones.
A pesar de que contamos con algunas de las clínicas más avanzadas y seguras del continente, lo cierto es que en muchas ocasiones resulta difícil identificar el establecimiento adecuado. A continuación, te proporcionamos algunos consejos para seleccionar una buena clínica estética. Para ello tomaremos como referente el centro Dra. Obregón Reina, una clínica estética Pozuelo reconocida y líder en el sector. ¡Presta atención!
Instalaciones y recursos técnicos
Las instalaciones constituyen uno de los factores diferenciales más relevantes. No obstante, en el mercado podemos encontrar cierta heterogeneidad. Por un lado, algunas clínicas estéticas cuentan con unos espacios bastante austeros y prácticamente con un equipamiento orientado únicamente a tratamientos estéticos sencillos. En estos casos, lo más habitual es que el centro cumpla mayoritariamente funciones relacionadas con la atención al paciente. Una vez hecha la consulta se deriva al paciente a centros hospitalarios que cuentan con unos recursos técnicos y humanos avanzados.
Por otro lado, también podemos encontrar centros que cuentan con instalaciones más complejas y espacios en los que se llevan a cabo los procesos de forma integral. Este tipo de clínicas disponen de amplias instalaciones con equipamiento técnico de avanzadas prestaciones así como un equipo humano especializado que facilita una oferta de servicios y tratamientos más diversificada. No es necesario, por tanto, en estos casos, que el paciente se desplace a otros centros.
Política de atención al paciente
Uno de los principales activos de una clínica reside en sus políticas de atención al paciente. Aquellos establecimientos que cuentan con protocolos de comunicación basados en la transparencia y la fluidez, tienen mayores probabilidades de generar resultados efectivos. En muchos casos, los problemas de entendimiento o legibilidad pueden derivar en problemas o, en los peores casos, en negligencias.
Un buen centro estético dará prioridad a las necesidades del paciente pero, también, tendrá en cuenta su historial médico y hará un seguimiento continuo y pormenorizado de la evolución de los tratamientos. Además, su equipo se comprometió a ofrecer información clara, honesta y legal, anteponiendo en todo momento el bienestar, la integridad y la protección de sus pacientes.
Antes de formalizar un procedimiento o una intervención, es necesario que el usuario comprenda los riesgos potenciales asociados, si los hubiera, así como las posibles alternativas que están a su alcance. Además, debe comprender todas las implicaciones y debe haber resuelto todas sus dudas antes de dar un paso adelante.
Cada tratamiento debe estar perfectamente adaptado a las condiciones fisiológicas de cada paciente y deben orientarse hacia unos resultados naturales. En este sentido, el trato personalizado y unas políticas de atención adaptadas y cercanas pueden marcar la diferencia.
Imagen y reputación
Gracias a las nuevas tecnologías resulta extremadamente sencillo acceder a las valoraciones y reseñas. Para identificar un buen centro especializado en medicina y cirugía estética es recomendable que lleves a cabo una fase de investigación previa. Conocer qué tipo de experiencias han tenido otras personas te ayudará a obtener una aproximación de la clase de resultados que puedes esperar.
